El presidente de COPEGRAF, editora de Medios El Independiente, Julio Delgado, realizó ayer por la tarde una presentación en la sesión conjunta de las Comisiones de Asuntos Cooperativos y Mutuales, y de Comunicaciones e Informática de la Cámara de Diputados de la Nación, en la que habló de la grave crisis que enfrentan los medios gráficos del país, y en particular, las cooperativas de comunicación que carecen de las herramientas necesarias para hacer frente a los nuevos desafíos.
En la oportunidad, el también presidente de FADICCRA (Federación Asociativa de Diarios y Comunicadores Cooperativos de la República Argentina), comenzó realizando un breve repaso de la historia de El Independiente, que desde hace 54 años es un medio cooperativo, el primero del país, y al que continuaron otros muchos que hoy conforman diferentes confederaciones. En este sentido, Julio Delgado remarcó que en los últimos años “se han conformado cooperativas de comunicación de diferentes índoles, que integramos una gran red, que cubre todo el territorio nacional y que tenemos una identidad federal única, es la cobertura total de Argentina. Casi no hay localidad en el país en la que no haya una asociación, una cooperativa, una radio aborigen, una radio gremial, o fundamento sin fin de lucro, que esté cubriendo la información y que la esté divulgando.
Justamente –remarcó– una de las grandes diferencias que tenemos con los medios comerciales es que estos medios cooperativos, los miembros, nacieron a partir de una necesidad, es decir, necesitamos estar comunicados, necesitamos tener la libertad de expresión, necesitamos acceder a la información completa”. Sin embargo, remarcó que los medios de comunicación en general, y los gráficos y más tradicionales en particular, están pasando por una grave crisis económica que pone en riesgo su continuidad.
“En el caso de los diarios, los medios tradicionales, la Pandemia (por Covid-19), la emergencia sanitaria, fue un mazazo, marcó un antes y un después, en el sentido de que dependemos tanto de la circulación del bien físico, que al cerrarse kioscos, cerrarse los propios canales de distribución en cada departamento de la provincia, cerrarse comercios que podían publicitar, se trabó de una forma muy importante el trabajo en los medios gráficos cooperativos y en general de todos los medios gráficos del país. Entonces se empezaron a generar alternativas, algunos le empezaron a sacar páginas, otros le empezaron a sacar días de edición, otros le empezaron a sacar color, empezamos a tratar de abaratar costos, empezamos a hacer trabajos más artesanales con filminas, a elegir un papel más barato. La desregulación de la Ley de Papel prensa, también nos perjudicó en este punto”. “Pero, pese a todo, logramos mantenernos todos adentro, todos estuvimos en la contención de decir acá no queda nadie afuera”, espetó el presidente de COPEGRAF.
“Con todos adentro”
Siguiendo esta línea, Delgado consideró que “tal vez haya sido un error en aquel momento no prever que esta situación pandémica iba a generar una precipitación de los hechos de manera ya casi final para los medios gráficos en total”. “Necesitamos generar una reconversión, necesitamos gestionar, tener las herramientas para poder hacer el avance tecnológico en estas organizaciones cooperativas que no tiene muchos medios para poder hacer lo que se han visto impedido de hacer antes, que cuentan con muchos compañeros, algunos de ellos en el transcurso del tiempo dejaron de fundir plomos para pasar a escribir en una máquina de computadoras y posiblemente hoy tengan que estar avanzando en otros equipos mucho más tecnológicos no con la misma idoneidad”, espetó.
Además, remarcó: “yo entiendo que en esta discusión de avances tecnológicos en la cual nosotros y el mundo se debe enfrentar, que tenemos que hacerlo, que tenemos que avanzar, pero nosotros siempre tenemos la previsión de no dejar ningún compañero afuera. Ahora, ¿podemos avanzar con los compañeros todos adentro?, sí, con un proceso de capacitación, con un proceso de salida, con un proceso, digamos, de contención para el compañero que ya tiene la edad tal vez de retirarse”, pero para esto, existen muchos impedimentos, señaló Delgado, entre los más importantes, el no reconocimiento como “trabajadores cooperativos” a todos ellos que conforman los medios de comunicación del sector de la economía social.
“Nosotros somos todos monotributistas, uno que reconoce al trabajador autónomo, a un trabajador único, pero que no reconoce al compañero de manera colectiva. La categoría de monotributo social, que muchas cooperativas de comunicación de todo el país integran, es decr, aproximadamente 1.200.000 personas, van a quedar fuera del sistema, van a quedar fuera de la formalidad que le da, por lo menos, tener una previsión de jubilación y en la categoría que sigue, la ‘A’, va a tener un aumento de 140%. Estas son las cosas que nos impiden tener una discusión para hacer este salto tecnológico con los compañeros, todos incluidos y todos contenidos”.
Finalmente, Delgado manifestó que “necesitamos la discusión para que se modernice la Ley de Cooperativas, que incluya una ley diferente o, tal vez, un capítulo diferente con respecto a las cooperativas de trabajo, que tenga un reconocimiento previsional, que tenga un reconocimiento, también, por ejemplo, a los accidentes laborales, porque a pesar de que tenemos la resolución del INAES (Instituto Nacional de Asociativismo y Economía Social), ninguna aseguradora del país recibe a compañeros monotributistas de cooperativas. Esta es la situación en la cual me quisiera aportar y acompañar a lo que ya dijeron los compañeros acá presentes”.